“Nadie existe solo, nadie vive solo.
Todos somos lo que somos porque otros fueron lo que fueron” Julio Medem.
Un árbol genealógico es un esquema
gráfico que nos ayuda a situar a los antepasados en relación a nosotros y nos
permite entender las relaciones existentes ya sean simples o complejas.
Un árbol genealógico nos ofrece una
cantidad de información valiosa para entender quiénes somos y porque somos así;
estableciendo los nexos o relaciones con nuestro pasado, presente y futuro permitiéndonos:
- Conocer la información sobre nuestro origen familiar.
- Conservar las huellas de nuestro pasado y transmitirlas a las generaciones siguientes.
- Construir una memoria emocional para entender o darle sentido a nuestros comportamientos.
La construcción del árbol genealógico
como estrategia pedagógica permite:
- La interpretación del lugar que se ocupa dentro de los hermanos en la estructura física y emocional.
- El doble linaje de ascendencia y/o descendencia, desde las tradiciones, nombres, conflictos, muertes.
- Los elementos que se repiten como edades de casamiento, labores o eventos repetitivos.
- La información que le permita descubrirse y describirse para entenderse y explicarse mejor.
Para elaborar un árbol genealógico es
necesario:
- Recoger los datos que se pretenden colocar en la estructura del árbol.
- Organizar de forma ascendiente o descendiente.
- Establecer un límite en la genealogía.
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